EL LINO. El lino tuvo extraordinaria importancia económica en Segura, a pesar de que hace mas de 100 años que no se cultiva, todavía se llaman linares ( por sembrarse en ellos el lino) a las mejores fincas de Segura, situadas en Bayona. En escrituras aparece la compraventa de pozos para cocer el lino etc... El lino se empezó a aprovechar hace millares de años en las regiones del Nilo, con la civilización egipcia. Es un tejido natural magnífico, el mas resistente y confortable, es transpirable. Su decadencia comenzó con la industrialización del algodón y posteriores fibras sintéticas. A finales del siglo pasado floreció sobre todo su cultivo, debido a espabilados cazaprimas vinculados a la administración, que posteriormente lo quemaban porque su uso es escaso, dentro de los planes contradictorios que vienen desde la CEE, (menos mal que no primaban también la quema del mismo porque el círculo entonces hubiera sido perfecto). Su uso actualmente es debido a que lo incorporan los diseñadores de la moda. Labores del Lino Estercar. El linar se abona con estiércol de cabra durante el invierno. El lino de fibra prefiere clima húmedo y templado. Arado. El arado se realiza preferentemente con arado tipo romano tirado por yunta de burros. La tierra no debe quedar apelmazada porque la semilla al ser pequeña no podría germinar. Sembrado. El lino se siembra a voleo, a flor de tierra con abundancia de linaza, a primeros de Abril. La flor del lino es de color azul, da unas gárbolas en cuyo interior se encierra una bolita menuda o linaza que sirve de grana. Posteriormente se tapa la semilla realizando surcos para poder regar posteriormente, formando naves. Riego del lino. Comienzan los riegos cuando la planta empieza a crecer si el tiempo es seco, repitiéndose cada 8 días, hasta el mes de Junio en que la planta muere. El lino es una planta que necesita abundante agua. Escardado y esvarado. Con el lino nacen abundantes hierbas que favorecidas por los abundantes riegos crecen mucho, se eliminan con el escardado, moviéndose la tierra. Cuando el lino ha crecido mucho y debido al peso de la flor y a su delgadez, puede caerse y pudrirse con la humedad, para evitarlo se levanta con varas de madera, llamándose esta operación esvarado. Arrancado. Cuando la planta ha madurado y está seca se arranca conservando las raíces. Ha de arrancarse temprano, con las primeras luces del día, cuando tiene marea y no se desgrana. Después de arrancarse se juntarán las plantas en manojos que varios juntos forman un haz, atándose con paja de centeno o el mismo lino. Esbagado. El lino se dice que está en baga cuando contiene aún linaza. Con una maza se golpea las gárbolas que contienen la semilla, separándose del tallo y las raíces (esbagado). La semilla servirá para realizar la siembra del año siguiente. Enriado. Después de esbagar el lino y atado en maña, se retuercen los extremos a modo de moño, se introduce el lino en pozos llenos de agua durante 8 a 15 días, si las aguas están calientes aceleran la cocción del lino. Cuando la piel del tallo despide una baba es señal de que está cocido. Es importante que la hebra se mantenga dura para que no se deshaga. Majado y fregado. Se disponen los tallos sobre una piedra lisa y se golpea hasta que se separa la corteza quedando al descubierto la hebra. Después se frota o friega la hebra con las manos quedando limpio de corteza o tasca. Espadado. La hebra de lino que ha quedado de golpea separando la fibra de primera calidad, el lienzo, de la fibra de segunda calidad, la estopa. Rastrillado. Tiene por finalidad dejar limpia la fibra de lienzo y la estopa. Al rastrillar la fibra se separa un tercer tipo de fibra que se llama atruesco. Posteriormente se realiza el hilado del lino. |