Piedras Labradas
La ruta a Piedras Labradas es aproximadamente de 13.5 km en total. Además de las ruinas del templete romano se pueden ver multitud de rocas con extrañas formas y en concreto dos monstruos, también se tienen unas magníficas vistas al valle del Ambroz.
Saldremos desde la parte superior del pueblo por una pista encementada rodeados por las paredes de las fincas colindantes, pronto pasaremos por una puerta a la dehesa rodeados de encinas. A la izquierda podremos apreciar una antigua construcción para cerdos. Avanzaremos por una cómoda pista hasta acercarnos a una curva en donde existe un desvío que conduce a Casas del Monte. Nosotros seguiremos por la pista a la derecha, ahora rodeados de enormes robles y algunas cuestecitas. Aunque existen varias fuentes en el camino conviene llevar agua porque en verano puede que no manen. Después de varios cambios de dirección llegaremos a una zona de descanso que sirve de mirador en donde existe una mesa con bancos. Aquí habremos dejado atrás los desniveles más fuertes, podemos seguir el camino que nos lleva directamente al templete romano o desviarnos para ver las rocas que existen sobre todo a la izquierda, al principio encontraremos el primer monstruo con mirada de espanto, las vistas del valle son espectaculares. Antes de ir a las ruinas podemos acercarnos a una zona de canchales en donde se encuentra el segundo monstruo, hay que subirse a una roca para poder verlo. Desde aquí nos podemos dirigir a los restos romanos situados en un bonito llano.
La puerta del templete está orientada al este, y la mayor parte de las piedras labradas se han diseminado por los alrededores, en la pared que delimita el llano y hasta en una caseta próxima. Desde aquí se puede subir hasta el collado de la Lancha. Para la vuelta podemos seguir el camino o desviarnos un poco hacia la izquierda para ver alguna pierda labrada suelta en una caseta entre zarzales. También podemos rodear el cerro existente y así poder ver las cascadas de la garganta Perdida, al final de este camino regresaremos a la zona del mirador con la mesa que habíamos dejado atrás, continuando por la pista hasta Jarilla. En el mirador podemos coger un camino que en fuerte pendiente nos llevaría hasta el pueblo pero en muchos sitios no es fácil de seguir salvo para los habitantes de la zona.
Templete de Piedras Labradas
